Empezando hacer lo que te gusta!
INCREÍBLE
A mis 46 años, la vida me regala la oportunidad de hacer lo que se me pega la gana.
Por fin!, después de casi 13 años en la misma empresa, me llegó mi liquidación tan esperada.
Seguramente habrá quién comente "uno debería hacer lo que le gusta", "apenas empiezas hacerlo?", "por qué tardaste tanto?"... y la verdad no me interesa explicarlo porque uno mismo sabe sus razones y simplemente no me importa darlas.
Lo que sí puedo gritar a los 4 vientos es la inmensa felicidad que me produce esta Libertad.
Hubo gente que se preocupó, otros que me presionaron para "hacer", algunos cuantos festejaron mi felicidad. Los Preocupados no podían ocultar su sorpresa en el tono y en su cara. Los Presionados necesitaban saber qué tenía planeado emprender e incluso me decían qué hacer. Pero los más maravillosos fueron esos que me saben, que me conocen y que simplemente me felicitaron y celebraron mi alegría.
No hay manera de expresar la inmensa gratitud y cariño que les tengo, por preocuparse, por presionarse y por alegrarse tanto por mí.
Les digo que no he parado.
Les comparto que hay mucho afuera de esas paredes amarillas!
Les platico que disfruto intensamente cada uno de mis días. Que disfruto como enana, que no he parado de Hacer desde que me liberaron, que cada día ha sido y sigue siendo diferente, que la monotonía se terminó y que la diversión no ha parado.
Ahora soy dueña, jefa y señora de mi tiempo y eso es lo más genial de todo.
Como quien dice "Vive la Liberté"!.
A mis 46 años, la vida me regala la oportunidad de hacer lo que se me pega la gana.
Por fin!, después de casi 13 años en la misma empresa, me llegó mi liquidación tan esperada.
Seguramente habrá quién comente "uno debería hacer lo que le gusta", "apenas empiezas hacerlo?", "por qué tardaste tanto?"... y la verdad no me interesa explicarlo porque uno mismo sabe sus razones y simplemente no me importa darlas.
Lo que sí puedo gritar a los 4 vientos es la inmensa felicidad que me produce esta Libertad.
Hubo gente que se preocupó, otros que me presionaron para "hacer", algunos cuantos festejaron mi felicidad. Los Preocupados no podían ocultar su sorpresa en el tono y en su cara. Los Presionados necesitaban saber qué tenía planeado emprender e incluso me decían qué hacer. Pero los más maravillosos fueron esos que me saben, que me conocen y que simplemente me felicitaron y celebraron mi alegría.
No hay manera de expresar la inmensa gratitud y cariño que les tengo, por preocuparse, por presionarse y por alegrarse tanto por mí.
Les digo que no he parado.
Les comparto que hay mucho afuera de esas paredes amarillas!
Les platico que disfruto intensamente cada uno de mis días. Que disfruto como enana, que no he parado de Hacer desde que me liberaron, que cada día ha sido y sigue siendo diferente, que la monotonía se terminó y que la diversión no ha parado.
Ahora soy dueña, jefa y señora de mi tiempo y eso es lo más genial de todo.
Como quien dice "Vive la Liberté"!.
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